Foto: Daniel James. / Encuestadores del INE organizan las boletas durante el censo anterior.
Luego de que el director nacional del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), Humberto Arandia, presentara su renuncia aduciendo problemas de salud, diferentes instancias vinculadas al proceso observan falta de transparencia y un supuesto interés del Gobierno nacional de postergar el censo fijado para el 16 de noviembre.
Pese a las críticas, Arandia, quien ayer fue ratificado en el cargo por el presidente Luis Arce, aseguró que la realización del censo no está en riesgo y que las actividades previas como la actualización cartográfica y la aprobación de la boleta censal se llevan a cabo en los plazos establecidos.
El asesor de Gestión de la Gobernación de Santa Cruz, Efraín Suárez, cuestionó que hasta la fecha el INE no haya mostrado información respecto al avance de la actualización cartográfica que permitirá determinar la cantidad de viviendas que tiene el país.
Por ello, Suárez alertó que desde el Gobierno “se quiere preparar otro fraude con el censo de este año”. “El pueblo boliviano está consciente de la falta de transparencia de lo que ustedes quieren hacer”, dijo el funcionario.
La autoridad departamental añadió que, en caso de que el censo no se lleve adelante el 16 de noviembre, o se realice de forma fraudulenta, se generará una crisis social y política en el país, dado que, en su criterio, la sociedad está cansada de fraudes.
Por su parte, el rector de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (UAGRM), Vicente Cuéllar, convocó a los miembros del Comité Interinstitucional Impulsores del Censo a una reunión de coordinación para tomar las medidas que correspondan, puesto que, ante la posible salida de Arandia, su reemplazante podría argumentar que no se tiene el avance suficiente para llevar a cabo el censo.
“No sé si es que no quieren mostrar realmente la información o no se ha avanzado nada o no quieren hacer el Censo de Población y Vivienda”, dijo Cuéllar.
El rector agregó que “ojalá no sea algo planificado” que muestre la verdadera intención de no llevar adelante el censo.
Asimismo, el diputado de Creemos José Carlo Gutiérrez aseguró que la renuncia del director del INE es algo planificado porque el Gobierno no quiere cumplir con el censo, puesto que, hasta posesionar a un sucesor, “se pasará el año”.
En tanto, el exsecretario general del Censo 2012 José Padilla observó mezquindad y escasa transparencia por parte del INE respecto a las actividades relacionadas al censo; sin embargo, dijo que la renuncia de Arandia no pone en riesgo la realización del censo, ya que este proceso no depende de una persona, sino de una estructura conformada por un grupo de profesionales del INE.
Padilla sugirió enfatizar el trabajo en la planimetría, el formulario y la capacitación del personal que llevará a cabo las encuestas. También recomendó a las gobernaciones y alcaldías fiscalizar el proceso “puerta a puerta” como ocurre en un proceso electoral.
/RI/Fuente: Los Tiempos