(La Paz, 10 jun ).- Una masiva marcha de militantes de oposición, miembros de agrupaciones ciudadanas, cívicos y representantes del Consejo Nacional de Defensa de la Democracia (Conade) llegó este mediodía hasta puertas del Tribunal Supremo Electoral (TSE), donde exigió la renuncia de los vocales de ese organismo y la elección de ciudadanos notables en su lugar, para que garanticen las elecciones generales de octubre de este año.
La protesta comenzó muy temprano en la ciudad de El Alto y, con gritos de “¡Bolivia ya votó, a Evo dijo no!”, concentró en su descenso a opositores y críticos del gobierno que demandan el respeto al referéndum del 21 de febrero de 2016, que rechazó la repostulación del presidente Evo Morales.
Entre otros, asistieron a la marcha los candidatos a la Presidencia de Comunidad Ciudadana (CC), el expresidente Carlos Mesa; Bolivia dice No, el senador Óscar Ortiz y de Unidad Cívica Solidaridad (UCS), el exvicepresidente Víctor Hugo Cárdenas.
También se sumó con un numeroso grupo de militantes el jefe de Unidad Nacional (UN), Samuel Doria Medina y el representante del Consejo Nacional por la Democracia (Conade), el rector de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), Waldo Albarracín.
Al inicio de la protesta el ministro de Comunicación, Manuel Canelas, había ofrecido una conferencia de prensa en la que denunció que el objetivo de la marcha era boicotear la elección general convocada para el 20 de octubre y advirtió de posibles actos de violencia.
En respuesta Albarracín llamó a los movilizados a evitar actos de violencia y ya cuando la marcha llegó hasta el frontis del TSE, ofreció un discurso en el que convocó a la elección de un grupo de ciudadanos notables en reemplazo de los actuales vocales, para que garanticen la transparencia de los comicios.
“No le vamos a llamar Corte, desde hoy día se van a llamar banda, por tanto que se vaya la banda, que renuncie la banda ¿Qué queremos alternativamente? No solo queremos que se vaya la banda, sino, para demostrarles que no queremos boicotear las elecciones, exigimos la constitución de un tribunal de personas notables, de personas de prestigio”, afirmó.
Dijo que esa corte de notables debería tener al menos cinco características: imparcialidad, neutralidad, credibilidad ciudadana, vocación de servicio y vocación democrática. “Esas virtudes estos sinvergüenzas que están ahí (señalando el TSE) no la tienen y por eso deben irse hoy día mismo”, complementó.
Al igual que en la mañana lo hizo el ministro Canelas, miembros del oficialista Movimiento Al Socialismo (MAS) denunciaron que el objetivo de fondo de los opositores es boicotear el proceso electoral ante la constatación de que no logran articular un frente que pudiera hacer frente al candidato oficialista.
“Tienen objetivos políticos reprochables, están queriendo boicotear las elecciones de octubre”, afirmó la diputada Valeria Silva, mientras el senador Milton Barón dijo que los opositores deberían responder primero “si en verdad quieren elecciones generales”.
La diputada Sonia Brito (MAS) opinó que la marcha muestra la «desesperación» de los candidatos de la oposición ante la falta de apoyo electoral.
«(Esa marcha) es un conglomerado de toda la derecha, preocupados ante el avance del apoyo del pueblo hacia el candidato del MAS (…). Están viendo que las encuestas van desfavorables a ellos y están queriendo ganar tiempo para tratar de hacer algo, de inhabilitar las elecciones. Que sean democráticos y que vayan a las urnas», afirmó.
Mesa dijo que al Gobierno lo que no le gusta es que la oposición “muestre unidad en defensa de la democracia” y ratificó que los actuales vocales no son garantía de transparencia para los comicios de octubre.
Consultado sobre lo que considera que harán los vocales ante el pedido de renuncia, respondió: “Lo que haga el TSE es un asunto del TSE. Lo que le pedimos es que deje el paso a verdaderas personas que pueden llevarlo adelante”.
La marcha llegó hasta puertas del TSE que se encontraba resguardado por un cerco de varias decenas de policías. Frente a ellos los manifestantes quemaron un par de muñecos que representaban a la presidenta del TSE, Eugenia Choque, y al vicepresidente, Antonio Costas, con mensajes exigiéndoles que renuncien a sus cargos.
El jefe de UN coincidió en que la preocupación del Gobierno es la unidad que demuestra la oposición en defensa del voto de los bolivianos. “El Gobierno está preocupado por esta marcha porque, primero, es un acto de unidad. Sabemos que están parcializados y no vamos a dejar que roben nuestros votos… Ponemos en evidencia que hay un Tribunal Electoral oficialista”, afirmó.
/RI/Fuente: La Razón