Foto: INE. / Censistas en Capinota.
La Paz, 30 de julio de 2023 (ABI).- El balance del Censo Experimental en el municipio de Capinota, Cochabamba, fue positivo y permitió establecer como aciertos la comprensión de la boleta censal, la importancia de la participación de los estudiantes del lugar y la colaboración de la población, informó el director del Instituto Nacional de Estadística (INE), Humberto Arandia.
“El balance de este ejercicio es positivo, dónde, definitivamente, los factores que pueden rescatarse como bien realizados, superan a las dificultades que hemos enfrentado”, afirmó en un balance del Censo Experimental que permitirá hacer ajustes rumbo al censo nacional del 23 de marzo de 2024.
El objetivo no era obtener las características de la población capinoteña, sino determinar todas y cada una de las bondades y defectos de los instrumentos desarrollados. Un equipo del INE hará el trabajo de cuantificación y cualificación de los instrumentos censales.
Tras la primera jornada de tres del Censo Experimental, Arandia resaltó la importancia de contar con la participación de los bolivianos para el Censo Nacional y trabajar de manera coordinada con los 343 municipios.
En Capinota -dijo- la población brindó su apoyo a los censistas para que puedan contar con la información que será útil para los instrumentos, procesos y procedimientos del Censo Nacional.
Además, relevó que la boleta censal fue fácilmente comprendida y calificó de positiva la participación de censistas del lugar, que hablan la lengua originaria de la región, lo que facilitó la comunicación durante la encuesta.
Entre las lecciones aprendidas, destacó que Bolivia tiene muchas diferencias entre las áreas urbanas y rurales.
“Una Bolivia está en la ciudad, en los centros urbanos, centros amanzanados, que posee niveles de infraestructura civil bastante apropiadas como comunicaciones, Internet, alcance a medios de difusión y de comunicación, están bastante bien informada”, informó.
En tanto, la Bolivia rural, en muchos casos, no posee acceso a Internet, posee escasa o casi nula señal de celular, y “es donde se dificulta la comunicación y la realización del proceso censal”.
Para el Censo nacional, se harán convenios, a través del Ministerio de Educación, para convocar a los estudiantes de 5º y 6º de secundaria y universitarios.
Los estudiantes tienen la capacidad de hablar y escribir tanto su lengua materna como en castellano, lo cual facilita el proceso censal, dijo.
El proceso estadístico contó con la asistencia técnica del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Centro Latinoamericano y Caribeño de Demografía (CELADE), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), y el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).
A partir del análisis interno y con el apoyo de las misiones internacionales de asistencia técnica, se podrán hacer ajustes para mejorar todos y cada uno de los aspectos con miras a tener un censo de calidad para los más de 12 millones de bolivianos en 2024.
Censo nacional
Explicó que, una vez terminado el Censo Experimental con su correspondiente informe y la modificación de los instrumentos, se iniciará la etapa censal nacional con el reclutamiento de toda la estructura organizativa, entre jefes departamentales, de zona y de sector.
Asimismo, se contratará a personas para la capacitación de los más de 600.000 voluntarios que trabajarán el día del censo.
En la parte logística, se adquirirá y dispondrá del material censal.
Serán cerca de nueve millones de boletas con 20 páginas; se comprará y adquirirá más de 150.000 cajas que van a ser utilizadas para los diversos segmentos del territorio nacional, y cada segmento tiene de 10 a 15 casas en promedio en el área amanzanada y de 30 a 35 casas en el área rural.
“Es un proceso bastante grande, pero lo que estamos viendo, a partir de este censo experimental, con buenos ojos, con ojos optimistas, pero tampoco son exitistas porque sí tenemos que mejorar en algunos aspectos”, reconoció Arandia.
/RI/Fuente: Agencia Boliviana de Información (ABI)