Foto: Hernán Virgo. / La tala ilegal de árboles crece en Santa Cruz.
En Brasil se realiza por lo menos un operativo al mes para hallar madera ilegal que proviene de los parques de Bolivia.
El tráfico de madera hacia Brasil está en ascenso. En el último año -desde mayo de 2021 al mismo mes de 2022- se realizaron en suelo brasileño diez incautaciones de madera proveniente de Bolivia. En la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques y Tierra (ABT) aseguran que existe un serio control a este delito, aunque en Brasil no ven acompañamiento en esta tarea.
“En 2021 fueron en ocho ocasiones que se incautaron camiones con madera, una vez fueron seis camiones; sin embargo, por lo general se encuentra un camión mínimo al mes. Ese tipo de aprehensiones o incautaciones se registraron así desde 2018. Hay algunos camiones que están incautados desde 2018 y 2019, en 2020 no tuvimos mucho, pero en 2021 realizamos esos ocho operativos”, explicó João Paulo Berté, delegado de la Policía de Vila Bela, una localidad brasileña.
El funcionario añadió que todavía no se hizo un trabajo como para identificar quiénes son los principales traficantes de madera, ya que esa misión debería ser encargada a autoridades bolivianas.
“Sin embargo, a los transportadores los conocemos todos, son siempre los mismos, porque inclusive hubo una familia completa detenida, en distintos momentos, por transporte de madera, desde el abuelo, hasta padre e hijos. Son personas que se dedican a este tipo de actividades como ‘profesionales’ porque saben quiénes son los vendedores en Bolivia, quiénes hacen el transporte, porque trabajan con un esquema de vigilar a la Policía. Mandan a un conductor antes y ese va mirando la entrada y si la Policía está ahí, va avisando por radio, entonces es muy difícil porque es una región con una frontera muy grande”, añadió Berté.
El delegado de la Policía de Brasil no entiende cómo las autoridades bolivianas no saben del problema de tráfico de madera, si los camiones pasan por las entradas normales, “(Los transportistas) no se esfuerzan por esconder porque la región es muy grande y la fuerza policial no está en todos lados”, indicó el oficial brasileño.
Controles de la ABT
En la ABT se informó que en el último tiempo se logró decomisar 446 trozas de las especies Tipa, Tajibo y Curupaú, producto forestal valuado en Bs 371.815,11. El total del volumen intervenido, que se encontraba en tierras fiscales del municipio de San Ignacio de Velasco, cerca de la comunidad Pailita, alcanza a 309,55 metros cúbicos, una cantidad significativa que iba a ir a parar al mercado negro de tráfico de madera.
Los parques naturales Amboró y Noel Kempff son los más afectados en el departamento de Santa cruz debido a la tala ilegal de madera. Según la Policía Forestal y Medio Ambiente (Pofoma) detrás de cada cargamento de madera existe toda una mafia internacional bien estructurada.
Esta unidad policial detectó que existen siete operadores que matan los bosques bolivianos: el cortador, dedicado a aserrar los árboles; lomeador, quien carga la madera; callapero, que baja madera a los ríos; proveedor, quien lleva víveres; camionero, quien lleva la madera; espía, quien alerta operativos; y el comprador.
/RI/Fuente: El Deber