Foto: Cancillería. / Mark Wells, subsecretario Adjunto para el Cono Sur de EEUU habló con el canciller Mayta.
MAYTA SE REUNIÓ CON EL SUBSECRETARIO ADJUNTO DE EEUU PARA EL CONO SUR, MARK WELLS
El gobierno de Luis Arce está en el “proceso de reconstrucción de confianza” con la potencia y trabaja aún en el marco de un acuerdo bilateral, que se suscribió en 2011 durante el gobierno de Evo Morales.
Bolivia y Estados Unidos retomaron ayer reuniones de alto nivel. En las mismas, ambos países expresaron su interés en estrechar vínculos en el marco del convenio de relaciones bilaterales de mutuo respeto y cooperación. En ese sentido, uno de los puntos que se tocó fue la reposición de embajadores entre ambos Estados.
La mañana de ayer, el canciller Rogelio Mayta se reunió con la delegación diplomática estadounidense liderada por el subsecretario Adjunto para Brasil y el Cono Sur del Gobierno de Estados Unidos, Mark Wells. En el encuentro hablaron de una agenda de interés común.
“En relación a la reposición de embajadores, sí pudimos conversar sobre este aspecto y coincidimos en que es parte de un proceso”, dijo Mayta.
La autoridad gubernamental recordó que Bolivia y Estados Unidos no tienen embajadores desde hace 15 años, cuando el expresidente Evo Morales expulsó en 2008 al embajador Philip Goldberg.
Mayta dijo que el Gobierno trabaja en el marco del acuerdo bilateral de 2011 suscrito en el gobierno de Morales.
“Estamos en ese proceso de reconstrucción de confianzas. Lo conversamos, no existe ningún tipo de compromiso, pero estamos empeñados en ese camino de reconstrucción de confianza”, insistió Mayta.
Desde la Embajada de Estados Unidos informaron que el encuentro fue para “explorar oportunidades de colaboración en beneficio de los dos países”. Wells también “mantuvo otras reuniones con miembros de la sociedad civil para fortalecer los vínculos de amistad entre estadounidenses y bolivianos”.
El tema diplomático no fue el único punto que se trató. Mayta informó también que Wells le expresó los temas prioritarios de interés que tiene la administración de Joe Biden en Bolivia y el canciller Mayta, por su parte, también mencionó los puntos prioritarios de Bolivia con el Gobierno estadounidense.
“Sin duda para todos nosotros son prioridades la recuperación económica después de la pandemia de covid, la desigualdad social, la cooperación y el comercio solidario e inclusivo y el interés de participar e invertir en Bolivia”, agregó Mayta.
En ese escenario, el gobierno de Luis Arce -a través de sus ministros de Planificación, Sergio Cusicanqui, y de Economía, Marcelo Montenegro- realizó en Washington, Estados Unidos, un intenso lobby en busca de nuevo financiamiento.
Los funcionarios del Estado boliviano participaron de reuniones con el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional. Consiguieron 12 contratos de crédito por alrededor de 1.485 millones de dólares para proyectos de inversión pública.
Las gestiones con logros de préstamos de las autoridades del gabinete económico se dan cuando el país enfrenta problemas de liquidez, además de escasez de divisas por la caída de las reservas internacionales.
Soberanía sobre recursos
El otro tema que tocaron Mayta y Wells fue el impasse que se suscitó por las declaraciones de la Jefa del Comando Sur, Laura Richardson. En marzo, la oficial estadounidense dijo que “adversarios” de Estados Unidos – en referencia a China y Rusia- se acercaban al “triángulo del litio”, al que pertenece Bolivia junto a Argentina y Chile.
Mayta dijo que en su momento, por la vía diplomática, se envió una nota de protesta por la declaración de Richardson. La calificaron como un “exabrupto inaceptable”.
Ayer, el canciller insistió en el tema. “Estamos convencidos de que se debe respetar el derecho soberano y democrático de cada país a decidir sobre el uso e industrialización de sus recursos naturales en beneficio de nuestros pueblos”.
En respuesta, el subsecretario Wells dijo que se descontextualizaron las palabras de la jefa militar estadounidense. “El señor Mark Wells nos señaló que esa sería una interpretación descontextualizada”, dijo Mayta.
Bolivia y Estados Unidos, 15 años sin embajadores
Bolivia y Estados Unidos no tienen embajadores desde 2008, cuando el entonces presidente Evo Morales declaró “persona no grata” al embajador estadounidense Philip Goldberg. Lo acusó de “conspirar y dividir” Bolivia e instruyó a David Choquehuanca, quien era canciller en ese entonces, que ordenara la salida del diplomático. El hecho ocurrió el 10 de septiembre.
“Pido a nuestro canciller de la República enviar hoy al embajador una nota haciendo conocer la decisión de su Presidente, para que urgentemente retorne a su país. No queremos gente separatista que conspire contra la unidad”, decía Morales.
Dos meses después, el 1 de noviembre de 2008, Morales también expulsó de Bolivia a la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA), entidad a la que acusó también de injerencia. En réplica, en junio de 2009, Washington suspendió a Bolivia el beneficio de la Ley de Preferencias Comerciales Andinas y de Erradicación de la Droga (Atpdea)
El 1 de mayo de 2013 Morales también ordenó la expulsión de la Agencia de Cooperación Internacional de Estados Unidos (Usaid).
/RIFuente: Página Siete