El presidente del BCB explicó que parte de los intereses por bonos en dólares se paga en bolivianos debido a la falta de billetes de corte menor, en medio de la escasez de divisas.
El Banco Central de Bolivia (BCB) enfrenta dificultades para cumplir con el pago total de intereses en dólares a los compradores de sus bonos debido a la falta de billetes de corte menor en esa moneda. Edwin Rojas, presidente de la entidad, admitió que esta situación obliga a realizar parte de los pagos en bolivianos.
“Por ejemplo, si tenemos que pagar 53,75 dólares, entregamos 50 en dólares y el saldo, de 3,75, se paga en moneda nacional. Esto se debe a que el BCB no cuenta con acceso a cortes menores en dólares ni a monedas extranjeras”, explicó Rojas este jueves en conferencia de prensa.
BCB
En marzo, el BCB lanzó la venta de bonos en dólares como una estrategia para recuperar la confianza y captar divisas. Inicialmente, la meta era recaudar $us 100 millones, pero esta cifra fue superada, alcanzando $us 200 millones tras la participación de la Gestora Pública de Seguridad Social a Largo Plazo.
El compromiso del BCB era devolver los dólares con intereses en la misma moneda, tanto a corto como a mediano y largo plazo. Sin embargo, la falta de billetes de menor denominación en dólares complica el cumplimiento de esta promesa.
La crisis de dólares, que se agravó desde la segunda mitad de 2023, sigue afectando la economía nacional. Los bajos ingresos por la exportación de gas han reducido la disponibilidad de divisas, incrementando los costos de productos e insumos importados y provocando una escalada en los precios.
El BCB, como actor clave en la gestión de las divisas del país, enfrenta críticas por no poder garantizar el acceso pleno a dólares en todas sus transacciones. Mientras tanto, el ente regulador insiste en que las Reservas Internacionales Netas (RIN) están al alza y se mantuvieron estables durante todo 2024.
Sin embargo, se destinó los dólares a cubrir la importación de combustibles y al pago de la deuda externa. El BCB busca alternativas para estabilizar la disponibilidad de dólares y cumplir con sus compromisos financieros.
//La Razón