Foto: ABI. / La expresidenta Jeanine Áñez recibe la banda para iniciar su gobierno en 2019.
Bolivia ha vivido en estos tres últimos años, desde las fallidas elecciones de octubre de 2019, una etapa de cambios y de retrocesos. Una muestra de esta dinámica es el encarcelamiento de la expresidenta Jeanine Áñez, quien prefiere definirlo más como “secuestro” que como reclusión.
En una entrevista con Los Tiempos, realizada mediante un cuestionario, la exmandataria respondió algunas de las inquietudes planteadas por el medio.
Manifestó haber vivido el 20 de octubre de 2019 con indignación por la “burla” de Evo Morales y el MAS hacia los bolivianos y la Constitución Política del Estado (CPE).
“Para habilitarse como candidatos usaron al Tribunal Constitucional, que militantemente autorizó la repostulación del binomio oficialista”, cuando el referendo de 2016 le dijo “no”.
Áñez sostuvo que el costo de las determinaciones del Tribunal Constitucional, al habilitar al binomio Evo-Álvaro, fue alto, porque perdieron la democracia y los bolivianos.
En 2019, las instituciones democráticas tocaron fondo. “No conformes con la impostura de la repostulación fraudulenta, también usaron al Tribunal Electoral para ganar las elecciones por las malas con engaño, con fraude y provocaron los disturbios y la convulsión social”, manifestó.
Para Áñez, ejercer el cargo de presidenta fue parte de su rol político. “Sólo hice lo que tenía que hacer, asumir la presidencia por sucesión constitucional, porque los cobardes huyeron, abandonaron a su militancia y los que seguían en la sucesión renunciaron, les faltó valor”, afirmó.
“Morales olvidó lo que una vez publicó en Twitter: ‘Quién se esconde o escapa es un delincuente confeso. No es un perseguido político’. Él se fue, huyó, se escapó y, cómodamente desde México, quería incendiar Bolivia”, manifestó.
Día a día
Actualmente, Añez pasa su día a día con su libertad limitada al extremo. “Me tratan como una criminal, teniendo a jueces y fiscales al servicio para sus ataques judiciales y mantenerme presa, llegan al extremo de desconocer mi presidencia, cómo no lo hacen con los que gobernaron en dictadura”, dijo.
Aún recuerda la satisfacción en el rostro del ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, y la euforia del excomandante de la Policía, Jhonny Aguilera, cuando la detuvieron el 12 de marzo de 2021.
“Ni con un asesino serial hicieron ese despliegue policial; una vez más, la experiencia me dice que es más fácil abusar de una mujer”, cuestionó.
“Yo con este Gobierno estoy en total indefensión. Es el precio que estoy pagando por cumplir con mi deber al asumir la presidencia y por no haber huido del país como lo hicieron los cobardes”, dijo.
Áñez afirmó que con lo vivido en el campo político, lo que venga del Gobierno no le sorprende y que confía en la justicia divina, “a no ser que se cumpla el deseo del Ministro de Gobierno de salir de esta cárcel con los pies por delante,o sea, muerta”.
“Estoy secuestrada por el régimen de Arce y sus operadores políticos que tienen bajo su mando a una justicia cuya genuflexión ha hecho que ya no se molesten ni siquiera en guardar las formas”, dijo.
Amparo Carvajal
La presidenta de la Asamblea Permanente de los Derechos Humanos de Bolivia, Amparo Carvajal, sobre Áñez indicó: “Voy por la calle y me gritan defensora de asesina, yo nomás estoy pidiendo que se defienda en libertad, que se defienda con la justicia, que ella reconozca y le den posibilidad de hablar libremente, eso para ella y para todos”.
Reflexiones y cuestionamientos a los logros de las mujeres en Bolivia
La exmandataria nuevamente pasó entre rejas el Día de la Mujer y el Día de la Despatriarcalización.
Calificó las fechas como “un mero discurso”, pues la participación de las mujeres en el Parlamento es un imperativo, ya que en escenarios de toma de decisiones son ignoradas.Recordó que al postularse a la presidencia fue duramente atacada por hombres y mujeres.
“Conmigo fueron durísimos, fui atacada por hombres y mujeres por haber tenido la osadía de postularme, no tenía ese derecho por haber dicho antes que no sería candidata. Yo no tenía derecho a cambiar de opinión, a los hombres no les cobraron nada aunque habían dicho lo mismo”, recordó.
Familia denuncia total vulneración
El hijo de la expresidenta Jeanine Áñez, José Armando Rivero Áñez, dijo que el sacrificio más grande que ha hecho su madre por la democracia “es su libertad”.
“Es una presa política y le han vulnerado todos sus derechos, como mujer, como exmandataria y hasta como boliviana”, explicó.
Agregó que está recluida por un “juicio totalmente viciado, lleno de irregularidades. Ni siquiera la están juzgando en la vía que le corresponde, ya que ella es una exmandataria, le corresponde un juicio de responsabilidades”.
Lo más penoso, según comenta, es que las mujeres, excolegas de Áñez, no tuvieron reparo para hacer videos en su contra, acción que no la hicieron con los hombres. Expresó que “la mentada sororidad es inexistente en el género”.
Al respecto, Amparo Carvajal, dijo: “Esta señora tenía que disfrutar cada día, pero realmente no lo hace. Todos somos un poco falsos como mujeres porque aunque firmamos y decimos que estamos con ella, si realmente lo hiciéramos, ella no estaría donde está”.
/RI/Fuente: Los Tiempos