Foto: Archivo. / Cientos de personas se vacunaban en enero del 2022 en el monoblok de la UMSA.

EL 10 DE MARZO DEL 2020, BOLIVIA REGISTRÓ LOS DOS PRIMEROS CASOS DE CORONAVIRUS

La tasa de letalidad bajó del 6% al 0,1% después de seis olas. Pero, los niveles de inoculación con el esquema completo se mantienen bajos. Hasta la fecha se alcanzó a inmunizar al 33% de mayores de 18 años.

El 10 de marzo del 2020, el gobierno de la expresidenta Jeanine Añez confirmó la presencia de los dos primeros casos del covid en el país. Hoy, transcurridos tres años de la llegada de la pandemia al país, el 77% de la población mayor de 18 años no cumplió con el esquema completo de vacunación. Además, los médicos advierten que muchas personas enfrentan secuelas que van desde dificultades respiratorias y dolores musculares hasta problemas psicológicos.

El 2022, el Ministerio de Salud confirmó que el esquema completo de vacunación anticovid se alcanza al obtener la tercera dosis y hasta la fecha 2,4 millones de ciudadanos mayores de 18 años cumplieron con esa meta, es decir un 33% de la población mayor de 18 años (7,3 millones de personas).

Entre los menores de cinco a 17 años, sólo un 40% cumplieron con la segunda dosis (1,1 millones) y un 52% de los estudiantes tienen al menos una vacuna (1,5 millones). Eso quiere decir que un 48% de este grupo de población no recibió ninguna dosis.

El director de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Jarbas Barbosa, pidió a los países que refuercen la vigilancia y subsanen las deficiencias en cobertura de vacunación para terminar con la emergencia y prepararse mejor para futuras crisis sanitarias.

El 13 de marzo del 2020, el ministro de Salud de ese entonces Aníbal Cruz informó que el país registró los dos primeros casos positivos después de haber recibido la confirmación de los estudios hechos en Atlanta. Se trataba de dos mujeres, una de 65 años, de Oruro, y otra de 60 años, de Santa Cruz.

“Comunicamos al país algo que se veía venir desde febrero. En ese momento no conocíamos al enemigo, era invisible. El país no tenía condiciones, incluso de diagnósticos, porque para confirmar la presencia de la enfermedad debíamos enviar las muestras CDC de Atlanta y los resultados llegaban después de cuatro días”, contó Cruz a Página Siete.

En ese momento, el país no contaba con la infraestructura, el equipamiento y los recursos humanos, además Bolivia atravesaba una endemia causada por el dengue con 160 mil personas infectadas. “Sin un sistema de diagnóstico inmediato y con las deficiencias que teníamos, la única respuesta que podíamos dar era cerrar las fronteras, los aeropuertos y suspender las clases”, agregó. En esa primera ola, que duró aproximadamente cinco meses, el país registró 20 mil personas infectadas y 4.000 muertos. Según los reportes de Salud, la tasa de letalidad de esa primera ola fue del 6,2%.

En la segunda ola se necesitaron unidades de terapia intensiva, además se vivió la crisis del oxígeno. El luto golpeó al país. “Al parecer fue la ola más devastadora y se vio una luz al final del túnel porque comenzamos la vacunación”, dijo Cruz.

El proceso de inmunización tuvo que esperar hasta la cuarta ola, cuando llegaron las vacunas para toda la población y conseguir la inmunidad de rebaño. En ese periodo se registraron 14 mil infectados, pero la tasa de letalidad cayó al 0,6%.

Se produjeron otras dos olas más que incluso superaron los niveles de infectados, pero el de decesos continuó en descenso hasta llegar al 0,1%, el más reciente.

Según el registro oficial, en toda la pandemia se infectaron 1,1 millones de personas y 22 mil personas fallecieron y la letalidad, en promedio, fue del 1,8%. “La solución para superar la pandemia es la vacunación. Considerando que el esquema completo es de tres dosis debemos reconocer que aún estamos bajos, pero la contención de la enfermedad no sólo se dio en Bolivia, sino en todos los países del mundo. La vacuna frenó el covid y lo convirtió en una enfermedad endémica”, dijo el exministro de Salud Guillermo Cuentas.

El especialista aseguró que ahora el “gran desafío” que tienen las autoridades con el covid es determinar el porcentaje de secuelas que dejó en las personas. “Hay personas que quedaron con problemas neurológicos y cardiorrespiratorios, además de secuelas del sistema articular. Hay gente que quedó con problemas muy serios”, advirtió.

Alfonso Hinojosa, quien fue director del Policlínico Central de la CNS en lo más duro de la pandemia y que ahora atiende a pacientes en consulta externa, advirtió que vienen “muchas personas” con secuelas respiratorias de la primera y segunda ola. “Quedaron con problemas pulmonares severos, secuelas neuromusculares, dolores de espalda, neuropáticos y sensoriales que son muy delicados”.

Explicó que los casos más recurrentes son los de fibrosis pulmonar. “En esta temporada se vio a varias personas que se enfermaron con un resfriado común porque salieron negativos al covid, pero la respuesta pulmonar es severa. Presentan complicaciones como dificultad respiratoria y otros”. “Los pacientes también quedaron con secuelas psicológicas y ahora viven con un estrés continuo. Esta temporada de epidemia de enfermedades virales, influenza, gripe y resfríos comunes hizo que la gente se ponga muy susceptible”, afirmó.

/RI/Fuente: Página Siete

Por webmaster

¿Necesitas Ayuda?