Foto: CPILAP. / La minería contamina los ríos y los peces que luego son consumidos por pueblos indígenas.
A iniciativa de la Central de Pueblos Indígenas de La Paz se realizó un estudio en 36 comunidades. De las 302 personas a las que se tomaron las muestras, el 74,5% tiene elevados niveles de mercurio.
La contaminación por mercurio afecta a los habitantes de seis pueblos indígenas del Norte de La Paz hasta en siete veces el límite permitido de toxicidad, según un estudio científico publicado este martes a iniciativa de la Central de Pueblos Indígenas de La Paz (CPILAP).
Los más afectados son los tsimanes y ese ejjas, que se alimentan de peces y habitan en la cuenca baja de los ríos. Allí se concentran los desechos de la parte superior y hay actividad minera mecanizada y artesanal para la explotación del oro.
Según la Fundación Tierra, el estudio indica que el límite de concentración de mercurio permitido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) es de 1 ppm (parte por millón).
Mientras que las concentraciones de mercurio halladas en las muestras de los pueblos indígenas del norte de La Paz varían entre 1,9 ppm y 6,9 ppm.
El estudio “Impacto de la minería aurífera en comunidades indígenas” se realizó entre 2022 y 2023 con poblaciones ribereñas indígenas tsimane, ese ejja, leco, mosetene, uchupiamona y tacana. Todos viven alrededor del río Beni y de sus afluentes ríos Tuichi, Tejeque, Quiquibey y Madre de Dios.
La prueba llegó a 36 comunidades de estos seis pueblos indígenas, donde se tomaron muestras de 305 personas, incluyendo mujeres en edad fértil, a quienes se midió la concentración de mercurio en el cabello. El informe explica que las muestras fueron analizadas por los laboratorios de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA).
Contaminación con mercurio
“La contaminación más alarmante es la de los hermanos ese ejjas que consumen pescado y que por ello son los que tienen mayor contaminación, están con 6,9 ppm. Le siguen los tsimanes con 6,8 ppm; los mosetenes, con 4,0 ppm; uchupiamonas con 2,5 ppm; además, tacanas con 2,1 ppm y lecos con 1.9 ppm. Toda la recolección de datos supera el límite permitido”, explicó Lino Illimuri, vicepresidente de la CPILAP.
Según el estudio, de las 302 personas a las que se tomaron las muestras, el 74,5% resultó tener elevados niveles de mercurio, sobrepasando el límite permitido de 1,0 ppm en cabello. La media de concentración de mercurio en cabello de todas las personas evaluadas en el estudio es de 3,93 ppm.
Asimismo, de las 36 comunidades indígenas evaluadas, 18 tienen el 100% de su población con niveles de contaminación de mercurio por encima del límite permitido.
El informe de la Fundación Tierra indica que el presidente de la CPILAP, Gonzalo Oliver, señaló que pedirán de forma urgente conformar una brigada que haga un monitoreo a la salud de los indígenas.
“Vamos a realizar es iniciar las acciones legales correspondientes contra las instituciones del Estado que no están cumpliendo el rol en materia ambiental para prevenir estos efectos y la contaminación de los ríos de la Amazonia”, afirmó.
La exposición al mercurio —incluso a pequeñas cantidades— puede causar graves problemas de salud, perjudicar el desarrollo intrauterino y las primeras etapas de vida. Asimismo, el mercurio puede ser tóxico para los sistemas nervioso e inmunitario, el aparato digestivo, la piel, los pulmones, los riñones y los ojos.
/RI/Fuente: La Razón